Cuba antes de 1959 fue visitada por las personalidades más famosas de la época. Políticos, Artistas, Deportistas, Científicos, Actores de Cine, Presidentes y Miembros de la Cosa Nostra, todos querían visitar la isla y disfrutar de sus atracciones turísticas.
Seguro que no sabías que Babe Ruth el famoso pelotero de Las Grandes Ligas estuvo en Cuba en el año 1920, otro que nos visitó y hasta un sombrero se compro en la tienda El Encanto, fue el premio Nobel de Física Albert Einstein, el cantante Frank Sinatra también estuvo en Cuba dos veces el 1946 y en 1951, el actor Gary Cooper muy conocido por sus películas de oeste, y hasta Tarzán, Johnny Weissmuller dejo la selva y se fue a Cuba.

Babe Ruth.
El famoso Babe Ruth, uno de los iconos del béisbol mundial, popularmente conocido como el “Bambino”. Estuvo en Cuba entre los meses de octubre y noviembre del año 1920. El promotor cubano Abel Linares, acordó con el propietario de los Gigantes de New York, John McGraw, celebrar en Cuba, una serie de partidos de béisbol con clubes cubanos Habana y Almendares.
El promotor cubano se puso de acuerdo con Babe Ruth, para que jugara con los Gigantes pagando 2 mil dólares por cada uno de los 10 encuentros acordados, también incluía los gastos del viaje de la esposa y el promotor del Bambino, llamado Igor. En aquella época 20 mil dólares era una cifra muy difícil de rechazar.
Los partidos se jugaron en el estadio, “Almendares Park” en la Habana después de la publicidad que se dio por los periódicos y las emisora de radio de la capital, en tres días se agotaron las entradas. Babe Ruth participó en los 10 partidos conectó 10 hits en 29 veces al bate, incluyendo un doble, un triple, y dos jonrones y promedio para 345.
Según cuentan todo el dinero que le pagó Abel Linares, y algo mas que trajo el “Bambino” lo perdió apostando en las carreras de caballo, en el hipódromo Oriental Park y en el Jai Alai, y para no irse con las manos vacías aceptó jugar dos partidos más en la ciudad de Santiago de Cuba, por la suma de 3 mil dólares, pero antes de regresar a los Estado Unidos volvió al hipódromo y perdió todo el dinero que le quedaba.

Albert Einstein.
Después de una larga travesía en un barco desde Holanda, llegó a Cuba el 19 de diciembre de 1930 el científico alemán más grande de la historia Albert Einstein. Cuando el premio Nobel de Física puso un pie en la Habana, quiso comprarse un sombrero de verano, por que el día está muy caluroso, entonces lo llevaron a la tienda más exclusiva de la capital, El Encanto.
Los dueños tuvieron un detalle con el científico y le regalaron un sombrero jipijapa, lo llaman así porque se confecciona con un tipo de palma oriunda del Ecuador. Aunque Einstein insistió en pagar, los dueños no aceptaron, lo único que le pidieron al científico fue una foto en el estudio fotográfico de la tienda la que fue aceptada amablemente por él.
El premio Nobel de Física conoció en Cuba desde los bares más lujosos, estuvo en los centros científicos más importantes, la Escuela de Aviación Curtis, la Sociedad Hebrea de Cuba y hasta los barrios y solares más humildes de la Habana.
Ya han pasado más de 90 años de la visita de Albert Einstein a Cuba y todavía se conservan en la Academia de Ciencias de Cuba fotos y artículos realizados por la prensa de la época acerca de la visita del científico alemán.

Frank Sinatra.
En febrero del año 1946, con 31 años de edad llegó Frank Sinatra a la Habana. Fue la primera visita de de La Voz a Cuba, se hospedó en el Hotel Nacional y coincidió con la reunión de los principales jefes de la Cosa Nostra en el Hotel. Se dice que fue invitado por Lucky Luciano, para desviar la atención y poder planificar los planes futuros de la organización sin llamar mucho la atención.
De esa primera visita muy poco se puede contar. Regresó en noviembre de 1951, en esta ocasión vino acompañado por su esposa Ava Gardner, en un viaje de recién casados. Sinatra y Gardner querían pasar unos días alejados de la prensa y de los paparazzis, pero cuando eres una figura pública es muy difícil pasar desapercibido.
Frank Sinatra mantuvo a Ava Gardner todo el tiempo encerrada en su habitación del Hotel Nacional, cuando la sacaba la llevaba escondida y no permitía que se le acercara nadie, la mantuvo siempre alejada del público, fotógrafos y reporteros.
Ava era una mujer muy bella y ya era un icono del cine erotico de Hollywood. Todos querían tener una foto de recuerdo de la actriz, en tanto a Sinatra ni se le podía escuchar, por que su contrato de exclusividad no le permitía cantar en Cuba.
El dueño del cabaret Montmartre ubicado en la calle O en el Vedado, invitó a la pareja y le regalaron una gran torta de boda, ambos posaron sonrientes ante las cámaras de los fotógrafos, también visitaron el cabaret Tropicana pro ahi evitaron las cámaras indiscreta de los periodistas y no hubo declaraciones a la prensa. Nunca se sabrá como le pasó en Cuba la pareja de recién casados, pero de haber cambiado su actitud se hubieran ganado el afecto de todos, dejando una grata impresión de afinidad y sencillez.

Gary Cooper.
Este actor es ganador de dos premios Oscar, en 1941 por la película el “Sargento York» y en 1952 por la actuación en la cinta “Solo ante el Peligro». Gary Cooper es muy reconocido en el mundo entero por sus protagónicos en las películas norteamericanas del Oeste.
En el año 1930 decidió tomarse un descanso y visitó Cuba, para pasar unas merecidas vacaciones. Regresó en el año 1949 y visitó en la finca La Vigía al escritor norteamericano Ernest Hemingway y se le vio más de una vez junto al escritor disfrutando de un Daiquirí en el bar preferido del premio Nobel de literatura el Floridita..

Johnny Weissmuller.
El doble campeón olímpico en París 1924 y Amsterdam 1928,el famoso actor que interpretó el legendario personaje de Tarzán, también visitó la isla en los años 50, fue invitado a jugar un torneo de golf en la Habana con otras famosas celebridades.
Pero muy pocos saben que el grito de Tarzan salvó a Johnny Weissmuller de un intento de secuestro por el movimiento 26 de julio. Según cuenta su hijo Johnny Weissmuller Jr en un libro sobre la biografía de su padre.
Johnny Weissmuller se hospedó en el Hotel Nacional, y una noche los miembros del movimiento 26 de julio, que acostumbraban en aquella época secuestrar celebridades que visitaban la Habana, para llamar la atención trataron de raptar a Tarzan.
Por suerte el secuestro no se llevó a cabo gracias al “Grito de Tarzán”, los delincuentes no entendían el inglés, pero el grito bastó para que se dieran cuenta que se trataba de Johnny Weissmuller el famoso actor de la película de Tarzán. Los delincuentes desistieron del rapto porque el actor con el grito puso en alerta a los custodios del Hotel Nacional.